Una más del sexo débil

Una noche -de esas que uno se echa en su cama a ver placenteramente la TV- escuché en un canal de cable una frase que dice más o menos así, "no existen los caballeros, sino los hombres desesperados por sexo". Entonces me reí, pero al mismo tiempo me puse a pensar en que si fue un hombre o una mujer quien diseñó tal comentario. Y entonces dividí mi reflexión en base a las dos obvias respuestas. Si fuese un hombre, entonces posiblemente se trataría de una típica broma machista, de esas que aún tenemos muy impregnadas en esta parte del continente. ¿Pero y si fue una mujer? Ahí creo que la cosa cambia. ¿Por qué? porque desde hace buen tiempo las féminas vienen reclamando una igualdad en relación al género masculino -derecho que lo merecen y no sólo ellas, sino cualquier ser humano en relación a su entorno- entonces, esa frase de la TV estaría contradiciendo cualquier reclamo o manifestación feminista. ¿O acaso no creen ellas que pueden ser merecedoras de un buen trato, sin pedir nada a cambio?

Las mujeres luchan a diario por el reconocimiento, respeto, admiración e igualdad de parte de los hombres, pero hasta ahora no se dan cuenta que no lo conseguirán -al menos el de toda la población masculina- mientras no superen la principal barrera. Ellas mismas.

He ahí porqué nos mofamos del sexo débil.